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Montserrat Muñoz
Guadalajara, Jal, 20 de diciembre 2015.- (aguzados.com).- Según datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), en México el sobrepeso infantil crece 1.1 por ciento cada año. Este problema ha llevado a investigadores de distintos ámbitos a enfocar sus esfuerzos para explicar y, en su caso, abonar en las respuestas y soluciones sobre este tema.
A este esfuerzo se sumaron los médicos Ruy Pérez Tamayo, Beatriz Salazar Vázquez y Miguel Salazar Vázquez quienes, a través del libro ¿Gorditos o enfermos?, plantean el panorama actual de la obesidad infantil en el país y ofrecen, a la vez, posibles soluciones y recomendaciones para evitar que los niños de hoy se conviertan en los obesos de mañana.
"La obesidad es un problema mundial de gran magnitud", sostuvo el médico y divulgador científico Ruy Pérez Tamayo, durante la presentación de la obra, editada por el Fondo de Cultura Económica (FCE).
El investigador señaló que esta condición ha tomado protagonismo en las esferas de salud de varias latitudes, haciendo a la obesidad un objeto de estudio prioritario para los médicos. Expuso que en 1988, ocho por ciento de la población de cinco años o menos presentaba sobrepeso; sin embargo, en 2012 este índice alcanzo 9.7 por ciento, ello acorde con datos del INSP.
En edades escolares, de los seis a los 12 años, la brecha fue mayor al pasar de nueve a 14 por ciento de 1999 a 2012, mientras que en adolescentes pasó de 11.1 por ciento en 1988 a más de 34 por ciento.
"Esto representa un problema nacional y casi una emergencia de salud", señaló Pérez Tamayo, tras lo cual se resolvió a escribir este libro, mismo que desde el título pretende llamar la atención de los padres de familia, que en la mayoría de los casos no discierne los riesgos del sobrepeso y obesidad infantil.
Para intentar dar respuesta a la pregunta que da título a la obra, se hace la diferencia entre dos grupos de obesos: funcionales y no funcionales. “Los funcionales son un poco gordos, un poco pasados de peso. Es el que nunca se va a poner a dieta, el que siempre ha sido sano. La diferencia está en el factor de riesgo”, apuntó el patólogo. Los no funcionales, por su parte, son los que desde edades tempranas presentan enfermedades a causa del exceso de peso, como la diabetes.
Destacó que 50 por ciento de los niños gordos son más propensos a la diabetes, posibilidades que aumentan a 75 por ciento si los padres también son obesos, y llegan a 100 por ciento si los padres tienen diabetes también, señaló el investigador.
"A veces sí y a veces no", concluyó el doctor. La obesidad no es sinónimo de enfermedad, ya que ambos términos se encuentran catalogados dentro de una amplia escala cuantitativa. No obstante, el libro contiene una tabla para calcular el índice de masa corporal, así como un estimado de los pesos y tallas que deben tener los menores durante su crecimiento, a fin de ayudar a mantener a los niños dentro de los parámetros.
Investigación
¿Gorditos o enfermos?, presentado en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara 2015, es el resultado de una investigación de tres años que realizaron los tres autores. Comenzó con un grupo de adolescentes de la zona norte del estado de Durango. Esta edad se eligió debido al cambio de hábitos alimenticios que suceden en ella, explicó la médica Beatriz Salazar, quien resaltó que cada uno de los jóvenes participó en la investigación por voluntad propia.
El principal interés de este estudio fue prevenir la obesidad a través de modificar cinco hábitos alimenticios: comer despacio, dejando cada bocado al menos 30 segundos en la boca; no repetir porciones, evitando repetir platillos o aumentar las porciones; evitar todas las bebidas azucaradas, haciendo del agua simple la principal bebida; comer sentados en la mesa sin distractores como la televisión o dispositivos móviles; y establecer y respetar horarios de comida, haciendo solo tres alimentos al día.
"Los resultados del programa han sido buenos, los niños bajan al menos tres kilos de peso en un año", señaló la doctora, aunque apuntó que disminuir el peso no es el objetivo del programa.
"Comenzamos con 54 niños, ahora tenemos 600 y vamos a llegar a mil 200. Esta investigación está respaldada por El Colegio Nacional, el Instituto Nacional de Salud Pública, la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), la Universidad de California en San Diego y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)", sostuvo.
El doctor Pérez Tamayo es quien se encuentra a cargo del programa nacional y se está tratando que llegue a las escuelas de tiempo completo. Se pretende también abarcar todos los grados de la educación básica, desde el preescolar hasta la preparatoria, teniendo con esto un mayor impacto.
Durante su intervención, el médico Miguel Salazar Vázquez compartió que es imposible tener un estimado del tiempo que pudiera tomar revertir los índices de obesidad infantil en México; sin embargo, urgió a comenzar con programas de prevención ya mismo para no seguir relegando el tema.
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Daniel Valles Peticholi
México, D.F., 20 de diciembre 2015.- (aguzados.com).- En la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), el investigador Gabriel Betanzos Cabrera desarrolló un proyecto que indaga sobre los beneficios del fruto de la granada en diversos padecimientos, elaborando un microencapsulado de su jugo que facilita el consumo.
La beneficios de la granada como antioxidante, antihipertensivo y su acción antiobesidad ya han sido demostrados en el laboratorio del doctor Betanzos Cabrera, profesor investigador en el área de nutrición del Laboratorio de Nutrigenómica del Instituto de Ciencias de la Salud.
“Los componentes del jugo tienen un efecto sobre el metabolismo de lípidos, inhiben la lipasa pancreática, que es una enzima que degrada los lípidos en el metabolismo, entonces al inhibirla no son asimilados y se excretan, por lo tanto no se absorben, de tal manera eso ayuda con la reducción de peso”, explicó el investigador en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
Los estudios con ratas han demostrado que el extracto de flor de granada provocó una importante disminución de peso, eso aunado con una reducción en los niveles de colesterol, triglicéridos y glucosa, lo que reafirmó la hipótesis de las propiedades benéficas de la granada.
En los estudios con seres humanos se aplicó a personas con síndrome metabólico; esta es una condición que predispone al desarrollo de diabetes, problemas de hipertensión y sobrepeso, por lo cual desarrollan enfermedades cardiovasculares.
“Tratamos de dar este suplemento para bajar la hipertensión y es como un antidiabético para mantener los niveles de glucosa estables y normales”, afirmó.
Es necesario aclarar que no se trata de una cura, es un suplemento de alimentación, es natural y ayuda precisamente a controlar los niveles de glucosa y triglicéridos.
“No es un producto milagro, para tener los resultados debemos ser constantes, no esperemos que se vea el resultado en 24 horas, esto es natural con propiedades medicinales, que requiere tomarse constantemente”, aseveró.
Microencapsulado
Gracias a sus estudios en el análisis químico, bioquímico molecular, experimental y los ensayos clínicos con animales y humanos que han mostrado un resultado positivo, se creó el microencapsulado ya que, explicó el investigador, uno de los principales factores para que no se consuma este fruto es porque solo se encuentra en temporada, otra razón es porque al ser difícil de limpiar y pelar la gente prefiere otros frutos. “Con este polvo de jugo de granada que es estable, solo deben disolverlo en agua y estaría listo”, aseguró.
Este suplemento alimenticio es creado mediante el método de secado por aspersión, esta tecnología lo que hace es eliminar el agua al máximo. El proceso debe ser calibrado para obtener el resultado deseado, y lo que crea son microcápsulas las cuales poseen las propiedades de la granada.
“En el proceso no se pierden las propiedades, es cierto que tendrían una disminución pero es por eso que deberíamos consumir tan solo una dosis más alta; no es lo mismo que tomar jugo fresco porque en el proceso se pueden descomponer ciertos compuestos y a veces el rendimiento de encapsulación no es al 100 por ciento, no suplanta al jugo natural pero sirve de gran manera”, comentó.
Del laboratorio al mercado
El producto ya está listo, y solo seguirá el proceso de patentamiento. Según Betanzos Cabrera, a pesar de que su principal enfoque no es ser empresario, hay un deseo para que su producto sea consolidado en el mercado, la razón es el sentido social de poder ayudar a la gente. "Es un producto en el que México resalta en su producción, principalmente el estado de Hidalgo que, según cifras de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), estuvo dentro de los primeros lugares en producción de toneladas de granada los últimos cinco años y a pesar de ello la gente no lo consume pese a sus grandes beneficios".
El futuro de la granada
Se siguen investigando las propiedades de la granada, las características genotóxicas que podría tener, también se está planteando cómo afecta en la biología de reproducción, pero por ahora el doctor Betanzos Cabrera quiere enfocarse en los mecanismos de acción. “Una cosa es qué hace y otra cómo lo hace, y eso toma más tiempo”, dijo.
También hay otro proyecto que consiste en verificar los factores antimicrobianos de este fruto, en el que se rentarán animales de laboratorio con una bacteria patógena, y se les dará dosis del polvo de jugo de granada para registrar si este protege al animal o incluso se elimina la bacteria.
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- Ecosur halla cultivos de soya transgénica en Bacalar, Quintana Roo
Chetumal, Q. Roo, 19 de diciembre 2015.- (aguzados.com).- El Colectivo de Semillas Much' Kanan I'inaj, integrado por indígenas, campesinos, apicultores y ejidatarios del pueblo maya del poniente de Bacalar, interpuso un amparo contra el permiso para la liberación comercial de 253,500.00 hectáreas de soya genéticamente modificada que la Sagarpa otorgó a Monsanto Comercial, S.A. de C.V, –solicitud número 007/2012, evento MON-04032-6– para siete estados de la República entre los que se encuentra Quintana Roo.
José Manuel Jesús Puc, uno de los demandantes del amparo, manifestó que el paquete tecnológico involucrado en la soya transgénica, y en general el sistema de producción a base de agroquímicos, pone en peligro su forma de vida y el territorio en el que ellos viven. Agregó que su derecho constitucional como pueblo indígena a la libre determinación fue violado ya que no se llevó a cabo la consulta previa, libre e informada. Afirmó que no los quieren debido a que saben que la ONU ha catalogado al glifosato –herbicida asociado al cultivo de la soya transgénica– como “probable cancerígeno”, que es el nivel cuatro de cinco en cuanto a canceriginiodad.
También señaló que el delegado de la Sagarpa en Quintana Roo, César Armando Rosales Cancino, declaró a la prensa el 6 de noviembre que “en la entidad no existe liberación alguna de organismos genéticamente modificados, ni siquiera en su fase experimental” y le pidió aclarar esto ya que el hallazgo del Ecosur contradice esta versión.
Concluyó señalando que este es un permiso ilegal debido a que el Instituto Nacional de Ecología (INE, ahora INECC), la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) negaron en sus respectivos dictámenes el visto bueno este permiso, por lo que nunca debió otorgarse ya que sus opiniones eran vinculantes.
Gerardo Tallavas Gascón, quien representa legalmente a los demandantes, informó que el amparo se interpuso el 22 de octubre de 2014 y que después de varios vaivenes entre Cancún y Chetumal para decidir qué Juzgado debía llevar proceso, finalmente se determinó que el juicio se llevara a cabo en el Juzgado Sexto de Distrito de Quintana Roo con sede en Chetumal cuyo titular es el juez Reynaldo Piñón Rangel. Agregó que actualmente el proceso está en su fase terminal y a la espera de sentencia ya que el expediente se encuentra totalmente integrado.
Rogel Villanueva Gutiérrez, investigador del ECOSUR Chetumal, expuso que llevó a cabo un estudio durante el mes de octubre de 2015 en los plantíos de soya de los ejidos de Salamanca y Blanca Flor en el municipio de Bacalar en Quintana Roo, que consistió en la recolección y análisis de muestras de semilla con el fin de determinar si se trataba de soya transgénica. El resultado del estudio es que de las 29 muestras tomadas de Blanca Flor ninguna resultó positiva, lo que significa que ninguna planta de todas las muestreadas fue transgénica; y de las 18 muestras tomadas en Salamanca ocho resultaron positivas, esto es, ocho de las plantas muestreadas eran de soya transgénica.
También agregó que los cultivos transgénicos implican una agricultura de monocultivo intensiva que está afectando seriamente a las selvas y bosques. Al desmontar las selvas y bosques para el cultivo de transgénicos se propicia el cambio climático al dejar libre de cobertura vegetal nuestros suelos. Esto provoca que la temperatura aumente considerablemente en toda el área desmontada. El cultivo de la soya es mediante el sistema agrícola de mecanizado, que elimina todo el componente vegetal (incluyendo raíces), dejando el suelo expuesto a la lluvia, el aire y posibles huracanes.
La soya transgénica es un cultivo que depende de agroquímicos para su éxito, por lo cual no se sostiene su desarrollo sin la aplicación de cantidades cada vez mayores de herbicidas e insecticidas, provocando graves efectos sobre el medio ambiente.
El uso de pesticidas y herbicidas afectan directamente a los polinizadores, lo cual provocará que muchas especies de plantas no sean polinizadas. El “Síndrome de Mortalidad de las Colonias” de abejas melíferas que está ocurriendo en Estados Unidos y Europa desde hace unos 10 años es un claro ejemplo de cómo estos agroquímicos pueden afectar a los insectos polinizadores.
Los herbicidas y pesticidas que se esparcen sobre los cultivos provocan finalmente la contaminación del manto freático y por ende del agua que consumimos.
Y concluyó afirmando que es importante buscar modelos agroecológicos y sembrar policultivos como la milpa maya, la cual no es una actividad agresiva hacia nuestros recursos naturales pues permite la regeneración natural de la vegetación.
Feliciano Ucán Poot, representante del Colectivo Apícola Chenero de Campeche y demandante en uno de los amparos que se ganaron el 4 de noviembre de este año en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con respecto al mismo permiso, comentó que es importante que el juez que lleva este caso en Chetumal, atienda lo que ha ocurrido en los otros dos estados de vecinos, Campeche y Yucatán, en donde la SCJN les dio la razón a los mayas demandantes de ambos estados otorgándoles el amparo de la Justicia de la Nación, dejando sin efecto legal alguno el permiso otorgado a Monsanto en tanto no se lleve a cabo la consulta previa, libre e informada a la que tienen derecho.
Juan Bautista Yeh Teh, integrante del colectivo de semillas y demandante del amparo de Quintana Roo, remató diciendo que a los mayas deben tomarlos en cuenta, que ellos tienen una forma de vida que ha permitido la conservación de su territorio y su medio ambiente, y que a diferencia de lo que muchos quieren hacer creer, los mayas sí existen “yo soy uno de ellos y nuestra cultura está viva” afirmó.
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Alan Gómez Mayén
Ensenada, B.C., 20 de diciembre 2015.- (aguzados.com).- En 1957 se creó la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), tres años después, el 15 de diciembre de 1960, mediante un decreto de la Rectoría se crea la Escuela Superior de Ciencias Marinas en Ensenada, ofreciendo la carrera de oceanología como la primera en su tipo a nivel nacional y latinoamericano.
A 55 años de la creación de esta institución de educación superior, el doctor Juan Guillermo Vaca Rodríguez, director de la que ahora es Facultad de Ciencias Marinas, habló en exclusiva con la Agencia Informativa Conacyt sobre la historia, el significado y los retos que conlleva para la UABC apuntalar una de las carreras pioneras en las Ciencias de la Tierra en México: la oceanología.
"En 1960, lo que hizo la UABC fue generar una carrera diferente a lo que se conocía, cuya oferta era inédita. En un inicio muchos profesores del Instituto de Oceanografía Scripps, de La Jolla, California, venían a dar clases; sesenta por ciento de la planta docente en la escuela eran norteamericanos. Con el tiempo desarrollamos nuestros recursos humanos, y ahora, si piensas en Colima y Oaxaca, son lugares donde ya existe la carrera de oceanología, y muchos de sus profesores salieron de aquí", explicó Vaca Rodríguez, quien en su desarrollo como docente ha impartido materias que abordan las aplicaciones de las matemáticas, en particular el cálculo y el álgebra lineal, en la oceanología.
"Es una carrera extraña, muy poco ortodoxa, por lo mismo fascinante, y evidentemente se necesita estar muy cerca del mar. Un oceanólogo puede aportar conocimientos geológicos al biólogo, por ejemplo, puede comunicarse con un químico para investigar de manera conjunta las bacterias marinas, o lo que pasa a nivel de corrientes con el fenómeno de El Niño", añadió.
Como muestra de la singularidad de esta carrera, biología, cálculo, química y física son materias básicas del tronco común, que se complementan con la natación, el buceo libre y el salvamento acuático, materias optativas que los estudiantes pueden cursar en el proceso de su preparación como científicos del mar y que también incluye trabajos de campo en embarcaciones y la reproducción de especies como el camarón y el ostión.
"Curiosamente, durante mucho tiempo la única opción de licenciatura en Ensenada era estudiar oceanología. Así de importante fue y sigue siendo. Como era una de las pocas ofertas de este tipo, mucha gente llegó de la ciudad de México y de otros estados para estudiar. Entonces además ha colaborado con la diversidad cultural, que es característica de Ensenada y de Baja California. Hay sonorenses, guerrerenses y un largo etcétera, extranjeros también, que llegan y adoptan Ensenada como su ciudad gracias a la actividad académica o científica", afirmó el director.
Alta demanda y baja matrícula
A pesar de que el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) apunta en un estudio que las carreras relacionadas con las Ciencias de la Tierra —que comprenden la oceanología— destacan por su alta remuneración, Vaca Rodríguez acepta que, desde siempre, la matrícula tiende a ser baja. "Hemos tenido periodos muy duros, en donde no nos queda de otra que cancelar cursos, afortunadamente ahora tenemos 720 alumnos repartidos en la licenciatura y los posgrados y la demanda ha estado incrementando".
Actualmente, la facultad ofrece tres licenciaturas: Oceanología, Biotecnología en Acuacultura y Ciencias Ambientales, además de posgrados como la especialidad en Gestión Ambiental y el Doctorado en Oceanografía Costera.
"Seguimos trabajando en la difusión de nuestra oferta académica. Durante la Semana de Ciencia y Tecnología del Conacyt, desde hace varios años traemos alrededor de 14 mil estudiantes de nivel básico y medio para que conozcan los proyectos, junto con la Facultad de Ciencias de la UABC, para que los estudiante se enteren y se desmitifique esta idea de que la ciencia es para nerds o para locos".
A 55 años de su creación, la Facultad de Ciencias Marinas de la UABC trabaja en un espacio museográfico propio, apoya la investigación de sus docentes, colabora y comparte experiencias con el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), el Centro Regional de Investigación Pesquera, todos en Ensenada, además de impulsar proyectos de vinculación con compañías privadas para asesoramiento e intercambios con academias norteamericanas como la Universidad de California, en San Diego, y el ya mencionado Instituto Scripps.
"Lo que tenemos en puerta es el cambio generacional de la planta docente, 35 por ciento de la planta se está jubilando en un periodo de año y medio. Es un reto grande pero también es una oportunidad para que jóvenes investigadores continúen con el desarrollo de la facultad. Tenemos que reinventarnos para lo que viene. En ese sentido, estamos fomentando mucho la acuicultura, tenemos un proyecto para un nuevo laboratorio de crías de totoaba; ya tenemos la capacidad para generar 50 mil crías pero vamos a crear un centro con el que esperamos generar hasta un millón de crías al año, algunas para reinserción al medio natural y otras para fomentar la acuicultura como alternativa a la pesca", concluyó el director.
Facultad de Ciencias Marinas. Carretera Transpeninsular Ensenada-Tijuana No. 3917 Colonia Playitas, 22860, Ensenada, Baja California, México Teléfono: 01 (646) 174 4570 Horario de atención: de 8:00 a 14:00 horas y de 16:00 a 18:00 horas
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Hermosillo, Son, 19 de diciembre 2015.- (aguzados.com).- La falta de disponibilidad de alimento en el mar por el fenómeno “El Niño” ha causado un aumento en la mortandad de mamíferos marinos, incluidos delfines que no son propios de la región como el “Listado del Pacífico” que fue encontrado muerto en San Carlos.
Según el titular de Laboratorio de Ecofisiología del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), Juan Pablo Gallo Reynoso, en los últimos dos años la mortandad de mamíferos marinos ha aumentado con relación a años anteriores por el fenómeno “El Niño”.
En los informes que posee el investigador se tiene conocimiento que de enero a la fecha en este 2015 se han encontrado entre 70 y 80 lobos marinos y lobos finos muertos a lo largo de las costas del Golfo de California, de una población total estimada en esa zona de 15 mil.
“Este año y el 2014 han muerto más animales que los anteriores, no tenemos cifras exactas porque hay lugares donde no podemos llegar, sin embargo, se hace un estimado de entre 70 y 80 el número de esas muertes, mientras que en los pasados fueron mínimas”, aseguró, el doctor Gallo Reynoso.
Este mismo fenómeno ha provocado la muerte también en los mamíferos acuáticos del litoral de Estados Unidos porque al calentarse el agua del mar las especies marinas se refugian en lugares más profundos o buscan áreas más frías.
Los mamíferos marinos juveniles son los más propensos a morir por la falta de alimentos en los lugares y profundidades donde están acostumbrados a pescar porque no conocen otros sitios y no están aptos para bucear más.
“Los lobos adultos van a otros sitios a buscar comida o persiguen los barcos, ellos saben dónde encontrar, los juveniles están aprendiendo, sufren más, y este año ha sido muy duro sobre todo en el Pacífico, ahí hay más mortandad”, externó.
Según investigadores del Laboratorio de Ecofisiología del CIAD estimaron que más de 8 mil lobos marinos que habitan en el Golfo de California, en edad de cría y adulto podrían morir este año a causa de la presencia de “El Niño”.
De acuerdo con el CIAD a lo largo del Golfo habitan cerca de 30 mil lobos marinos, distribuidos en trece islas.
Los investigadores han señalado que este año se prevé un mayor varamiento de los animales por la falta de disponibilidad de los peces como sardina huachinango y otros de talla pequeña, que sirven de alimento para las hembras.
El CIAD y la Conanp (Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas) están aún a la espera de que se autoricen recursos para investigar los efectos del cambio climático en los lobos marinos.
“El Niño” los hace sufrir
El delfín “Listado del Pacífico” que fue localizado muerto en la playa San Francisco hace dos semanas perdió su rumbo y al encontrarse débil por la falta de alimento fue arrastrado hasta esta zona.
Uno de los principales requisitos para poder practicarles necropsias a estos animales es que tengan menos de 24 horas de muerto, por los fluidos que sueltan posterior a este tiempo, de ahí que el número de necropsias que practican en el CIAD por año, no es alto.
“En años anteriores hemos practicado necropsias de lobos marinos y lobos finos y en ocasiones algunos delfines son pocos los recursos que disponemos nos apoyamos con Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) en la localización de mamíferos muertos”, externó.
Hace unos años encontró un delfín muerto del tipo “Listado del Pacífico” en San Blas y ha habido ocasiones que se observan pasear por las costas cercanas a Guaymas, en familia, nunca solos.
Este delfín es de agua tropical y se puede apreciar en el Mediterráneo, Atlántico y Pacífico, donde la temperatura del mar es más fría que en la región.
Cada mamífero consume poco más de un kilo de calamares y otras especies marinas al día, los cuales son localizados a una profundidad de hasta 100 metros y su tiempo de vida sobrepasa los 20 años.
En el análisis del aparato reproductor que se realizó en el Laboratorio del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) se observó que el cetáceo ha sido madre varias veces por la callosidad encontrada.
Indagan causas de muerte
En los resultados preliminares de las necropsias realizadas en el CIAD se detectó que los animales no habían comido lo suficiente en un tiempo considerable, lo que los debilitó y a su vez desorientó de su hábitat.
Alicia Masper, estudiante de doctorado en el Centro de Investigaciones en Alimentación y Desarrollo (CIAD), fue la encargada de practicarle la necropsia al delfín hembra de 15 años de edad, “Listado del Pacífico”, localizado muerto en la playa San Francisco.
La investigadora de origen italiano, antes de enterrar al cetáceo le tomó muestras del pulmón, hígado, estómago e intestino para conocer con exactitud las causas de la muerte.
Aunque aún no tiene el resultado final los estudios preliminares revelaron hallazgos patológicos de parásitos en diferentes órganos que indican que tenía más de tres semanas sin probar alimento.
Los golpes que presentó probablemente fueron producidos al ser arrastrado por el oleaje pues se encontraba débil, sin alimento y solo.
“El 50 o 60% de sus órganos estaban necróticos, eso es indicativo que no había comido en mucho tiempo y los parásitos causaron heridas para después comerles el intestino, hígado y otros, lo que nos revela que ese delfín ni con antibióticos o comida hubiera sobrevivido”, señaló Masper.
Las muestras serán enviadas a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para su análisis y a la par el CIAD evaluará los daños que causaron los parásitos, el tipo que se adhirió a la pared del estómago y las cicatrices causadas por las úlceras.
“Esta especie es de mar abierto y se asocia con el atún, eso no quiere decir que haya aquí, lo que le pasó en este caso es que se extravió, estaba muy flaca, no tenía grasa, puros ácidos, pero para especificar las causas de la muerte se tiene que evaluar todo”, subrayó.
Dos delfines muertos en 2015
En lo que va de este año, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa ) ha localizado dos delfines muertos, uno del tipo “Listado del Pacífico”, el cual habita en zonas tropicales y uno más de la región.
El inspector de la Profepa en la región Guaymas-Empalme, Efrén Germán Soto, tiene registrados dos fallecimientos de delfines, el primero hallado en la playa San Francisco de San Carlos en los meses de octubre y noviembre en la Bahía de Guaymas.
“No es muy común que se presenten estos eventos, pero en cuanto tenemos conocimiento se le da aviso a los investigadores del CIAD para que lleven a cabo el procedimiento de necropsia y así conocer las causas de sus muertes”, expresó Germán Soto.
El delfín “Listado del Pacífico” es llamado así porque su característica más notoria y que lo diferencia de otros delfines (dada su semejanza con las otras especies) es la coloración de su cuerpo.
Tiene una o dos bandas alrededor de los ojos que se extienden hacia la espalda y se ensanchan en la aleta dorsal. Otras dos rayas negras corren por detrás de las orejas, una de las cuales termina bajo la aleta; la otra es más larga y se curva hacia los costados y el vientre. Las aletas poseen rayas negras. Por otra parte, los flancos son de un tono gris azulado
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