- El conocimiento oceanográfico aporta verdades maravillas del saber humano
Ensenada, Baja California.- 23 de enero de 2017.- (aguzados.com).- Un programa interinstitucional que en los últimos 19 años ha generado conocimiento oceanográfico en las áreas física, química y biológica, se concentra en las Investigaciones Mexicanas de la Corriente de California (Imecocal), programa liderado por el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE).
Los estudios que durante casi dos décadas han desarrollado investigadores mexicanos pertenecientes a instituciones académicas con presencia en la península bajacaliforniana, se suman a las investigaciones que se realizan en Estados Unidos y Canadá, para ofrecer un panorama internacional sobre la corriente oceánica que recorre las costas de los tres países norteamericanos.
La metodología de los proyectos de investigación de Imecocal no es cosa sencilla, implica la realización de cruceros científicos para la toma de muestras en mar abierto —al menos dos veces al año—, los cuales a la fecha suman 60.
No obstante, investigadores fundadores del programa Imecocal subrayan la relevancia de que los cruceros no solamente se mantengan sino que se incrementen, con el afán de conservar el monitoreo puntual de una corriente marina que tiene gran relevancia para el clima y las pesquerías.
¿Por qué estudiar la corriente de California en México?
El sector sur de la corriente de California fue estudiado desde la década de 1950 a través del programa estadounidense denominado California Cooperative Oceanic Fisheries Investigations (Calcofi), que investigaba no solo la región de Estados Unidos sino también la mexicana.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, Bertha Lavaniegos Espejo, investigadora del Departamento de Oceanografía Biológica del CICESE y fundadora del programa Imecocal, relató que después de la década de 1970 los estudios de Calcofi comenzaron a restringirse al territorio estadounidense.
“Esta zona quedó un poco abandonada, la idea fue retomar la investigación en esta área y que nos corresponde. Nos apoyamos mucho en las estaciones que ya habían definido para esta región y de esta manera podemos combinar los datos históricos con los que estamos generando nosotros ahora”, apuntó.
Para José Gómez Valdés, investigador del Departamento de Oceanografía Física del CICESE, otro factor importante para que en 1997 se diera inicio al programa Imecocal, fue el fenómeno de El Niño que se presentó ese año.
La situación impulsó la organización de investigadores del CICESE, la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor) y el Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas (Cicimar), instituciones que hasta la fecha siguen participando en el programa.
“En 1997 pudimos salir al mar y monitorear los efectos de ese evento tan grande que fue El Niño de 1997 a 1998 y desde entonces hemos estado monitoreando la parte sur de la corriente de California, casi toda la parte de la península de Baja California, la parte del Océano Pacífico”, comentó Gómez Valdés.
Oceanografía física
José Gómez subrayó que un aspecto fundamental de las investigaciones de oceanografía física de Imecocal son los estudios de la circulación de la corriente de California, es decir, sus variaciones en espacio y tiempo.
Sin embargo, la corriente de California —que va de norte a sur— no está sola, pues está acompañada de otras corrientes, entre ellas la conocida como corriente subsuperficial, que fluye en dirección opuesta.
“Estas corrientes son muy contrastantes entre ellas, porque la corriente de California es una corriente de agua fría y muy ancha y la contracorriente subsuperficial es una corriente de agua cálida y muy angosta”, precisó.
El investigador del CICESE apuntó que otro aspecto importante de los estudios de oceanografía física de Imecocal es el cambio de temperatura en las aguas marinas del Pacífico Mexicano.
“Nosotros hemos hecho investigaciones en las que hemos visto que hay una tendencia a que las aguas mexicanas de la corriente de California se calienten por efecto del calentamiento global”, señaló.
Oceanografía biológica
Por su parte, Bertha Lavaniegos, investigadora del Departamento de Oceanografía Biológica del CICESE, explicó que su trabajo en Imecocal es específicamente con organismos microscópicos, cuyas muestras se toman utilizando redes que son arrastradas por el Buque Oceanográfico Alpha Helix, en el que realizan los cruceros.
Ejemplificó con el caso del fitoplancton, que se colecta con la ayuda de filtros de poro muy fino para recuperar estos organismos unicelulares, que son un indicador de la productividad vegetal del agua.
“Lo que más interesa es ver qué organismos hay, son organismos muy diversos, entonces lo que se trata de ver es primero grandes grupos, si tenemos crustáceos, medusas, y dentro de esos escogemos ciertos grupos para profundizar hasta llegar a nivel de especie; yo me concentro sobre todo en grupos que son muy abundantes como los eufáusidos, copépodos, anfípodos y dentro de los gelatinosos trabajamos un grupo que se llama las salpas”, abundó.
En el caso del plancton, refirió que la importancia de su estudio es que refleja cualquier cambio en el clima, pues al igual que con otras especies, la temperatura en el agua se refleja en su abundancia.
Clima y pesquerías
José Gómez Valdés señaló que la corriente de California forma parte de un conjunto de cuatro corrientes denominadas corrientes límites orientales de los océanos.
“Estas cuatro corrientes juntas son grandes controladoras del clima, porque ellas de alguna manera redistribuyen el calor, al traer agua fría del norte hacia el sur hacen que el sistema se retroalimente”, resaltó.
Además, las cuatro corrientes representan las zonas donde se encuentra la mayor cantidad de peces de interés comercial, producto de un fenómeno conocido como fenómeno de surgencias, que hace que las aguas subsuperficiales vayan hacia la superficie y trasladen nutrientes.
“Esas surgencias hacen que siempre tengamos nutrientes en la superficie, entonces con el sol y los nutrientes da origen a que haya grandes florecimientos algales y entonces empiece la cadena alimenticia”, detalló.
Dos décadas
A unos meses de que Imecocal cumpla 20 años de haber sido fundado, Bertha Lavaniegos consideró que han obtenido avances significativos, en primer lugar en la formación de recursos humanos.
“No solamente son los estudiantes graduados que hacen una tesis sino los que se suben a los cruceros, muchos estudiantes se suben porque representa un aprendizaje de métodos de muestreo en el océano, entonces sirve como un curso práctico”, destacó.
Además de ello, estimó que Imecocal ha crecido en reconocimiento y colaboración internacional, compartiendo datos con otras instituciones como Scripps Institution of Oceanography o las que participan en el programa Calcofi, lo que contribuye a la elaboración de un panorama completo del comportamiento de la corriente de California.
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