- Santiago Taboada está opacado por la sombra del infame cartel inmobiliario de la capital del país
Carlos Romo Medina
EL SÍDROME DEL saltimbanqui se ha hecho viral. Y no es para menos. Las ambiciones personales estuvieron, están y seguirán estando en la mira de los pequeños politiqueros que se piensan grandes políticos. El reciente caso del titular de la alcaldía de Cuajimalpa, Adrián Rubalcava Suárez, evidencia con transparencia que lo suyo, lo suyo, no es el interés ni el bienestar de la colectividad.
EL PRIISTA RENEGADO y que afirma haber renunciado a su militancia dentro del tricolor, refleja que a lo que no renunció ni renunciará es a cuidar su raquítica y efímera parcela de poder. El tal Adrián Ruvalcaba no busca cobrársela a quién se la hizo, sino que la pague la ciudadanía de la capital del país que no tiene vela en el pleito personal entre el susodicho individuo y el provisional dueño de lo poquito que queda del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
ADRIANCITO CREE TENER la simpatía de los electores de la ciudad de México como para que la mayoría salgan corriendo, casi tropezándose, a emitir su sufragio en favor de su “proyecto” político. No haya duda de que también el síndrome del ladrillo sigue haciendo su presa a las mentes débiles, cuyos propietarios son incapaces de distinguir la realidad entre la ilusión o las fantasías personales que obnubilan el cerebro.
SABEDOR DE QUE al tal Alito le hará lo que el viento a Juárez ahora intenta satisfacer su frustración vociferando que los diputados del Congreso de la Ciudad de México, afines a él según presume, votarán a favor de la ratificación de la fiscal Ernestina Godoy, fiscal que fabrica expedientes, encarcela inocentes y espía a la ciudadanía. Dicho arrebatado desplante solamente lo retrata en la empequeñecida dimensión en la que se encuentra y al parecer ha navegado durante su corta vida política.
COMENTARIO APARTE MERECE la designación o el dedazo que recayó en el panista Santiago Taboada, como el candidato del Frente Amplio por México, origen de la disputa entre Ruvalcaba Suárez y Moreno Cárdenas, cuando éste último le dio un aplastón al primero para que desistiera de su legítima aspiración por querer ser candidato de ese frente.
EL NUDO QUE aparece en esta trama de drama politiquero se deriva por los antecedentes del “designado” digitalmente, Santiago Taboada está opacado por la sombra del infame cartel inmobiliario de la capital del país, que, si bien hasta ahora no lo liga directamente con pruebas legales, el riesgo de que Morena descarrile su candidatura es altísimo.
TAMPOCO SE JUSTIFICA el accionar del tal Alito, pues es de sobra reconocido su “prestigio” por incumplir acuerdos; traicionar a sus aliados sin el menor pudor; reptar, trepar y asaltar al poder para lucro personal; así como desdeñar con prepotencia y desdén a quienes han sido sus compañeros “útiles”.
EN HONOR A la verdad, los cientos, miles de renuncias que se han sumado a las anteriores dimisiones oportunistas de quienes corrieron ansiosos y desesperados a los brazos de Morena, se le tienen que agradecer al susodicho Alejandro Moreno Cárdenas, el amlito disfrazado de alito.
EL MAL EJEMPLO de las pésimas prácticas políticas vaya que permean con facilidad, contrastando con las buenas prácticas políticas que son soslayadas reiteradamente por los “nuevos” dirigentes del tricolor que se treparon en la cúspide de las dirigencias estatales impulsados por el veneno del “alitismo” trasnochado y traidor.
POR ELLO, ASÍ como se dieron las renuncias o la huida de las filas tricolores de priistas considerados de “buena cepa” (lo que eso signifique y si es que han existido alguna vez) como los sonados casos de senadores, diputados federales y locales, gobernadores y regidores, esa extinta aplanadora electoral fue reduciendo drásticamente su tamaño para terminar en un partido “morralla”.
LA MUESTRA DE que el PRI es prácticamente un partidititito, lo evidencia la huida del senador yucateco Carlos Ramírez Marín que se refugió en las filas del PVEM, otro partidititito que hasta no hace mucho fue rémora del otrora poderoso partido llamado con prepotencia como “de las mayorías”.
DENTRO DE ESE mar de renuncias obligadas por el cierre de los espacios políticos dentro del PRI, se circunscribe la que hizo hace meses la regidora en el cabildo del municipio de Pabellón de Arteaga, en Aguascalientes, Edith Hornedo Romo, quien ante la cerrazón y ambición del grupito que “dirige” a ese partido en la entidad, no tuvo otro remedio que emigrar a otra organización política. Adivinó: se fue a Morena y ahora será la candidata a la alcaldía bajo el cobijo de esas siglas.
LOS POCOS PRIISTAS que aún permanecen en sus filas siguen creyendo que tienen la fuerza electoral de antaño, por lo cual sus dirigentes consideran que su muy evidente y marginal participación electoral dentro del Frente Amplio por México les otorga el derecho a muchas de las candidaturas que estarán en juego en todo el proceso electoral del año venidero.
CON ESA FALSA idea de sentirse indispensables para ese frente, los pocos priistas están dañando cada día más la frágil estabilidad de la oposición. Ya lo está haciendo el pendenciero y acomodaticio de Dante Delgado Rannauro con su membrete anaranjado apodado Movimiento Ciudadano (MC), por medio de su títere insuflado y que se dice gobernador de Nuevo León, Samuel García, otro pillo de siete suelas que traiciona sin vergüenza alguna a los neoloneses que lo eligieron su gobernador de tiempo completo y no a pedacitos como lo hizo el tristemente célebre “Bronco”.
SAMUELITO SE CANSÓ, en campaña, de repetir que no solicitaría licencia para ser candidato a la presidencia de la república, y lo que se aprecia es que está igualito a los de “siempre”, a los políticos que cuestiona (con sobrada razón) por sus viciadas y anquilosadas prácticas, pero que a la hora de la hora no le molesta replicar. Un tiranito aspirando a emular al aprendiz de tirano.
OTRA VEZ EL SAT perdona multas fiscales a Epigmenio Ibarra: van 19 veces en el sexenio. De acuerdo con una investigación de Jorge García Orozco publicada en el portal Emeequis, las empresas del grupo Argos, propiedad de Epigmenio Ibarra, propagandista del actual gobierno, recibieron en 2023 cuatro condonaciones de multas fiscales, que sumadas a las que ha recibido desde 2019 forman un total de 19.
LAS CONDONACIONES o “convenios fiscales” con los que ha sido beneficiado el productor son beneficios contemplados por la ley, pero que en los hechos están sujetas a la discrecionalidad del Servicio de Administración Tributaria, pues no todas las empresas que lo solicitan reciben dicha condonación. En el caso de Ibarra, que se dedica de tiempo completo a defender a la llamada “cuarta transformación”, sus cuatro empresas han suscrito estos convenios: Argos Televisión, Argos Producciones, Argos Soluciones Creativas y Argos Comunicación.
En sus propias palabras.
Me utilizaste Alejandro Moreno y no se vale. Hablar con la verdad lo da todo. Esto no me lastima solamente a mí, sino también a la sociedad que tiene la esperanza de encontrar una opción. El Frente Amplio sí traiciona. No tengo pensado un plan B. Hoy me separo del PRI nacional. Vamos a ratificar a Ernestina Godoy, por la traición. Adrián Ruvalcaba Suárez, alcalde Cuajimalpa.
La frase del día.
¿Quieres dejar de pertenecer al número de los esclavos? Rompe tus cadenas y desecha de ti todo temor y todo despecho. Epicteto de Frigia (55-135). Filósofo grecolatino.
El Bisturí. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones.
Y sí. La sola presencia de Alejandro Moreno Cárdenas, Marko Cortés Mendoza y Jesús Zambrano Grijalva en el Frente Amplio por México no es nociva per se. Su perversidad política es el verdadero peligro del proceso electoral en puerta. Inocultables son las ambiciones por buscar fuero y hacerse de un escaño en la próxima legislatura federal.
Colofón.
Toma chango tu banana.