Carlos Romo Medina
LA OBCECACIÓN se impone. La soberbia no cede. La ignorancia actúa. La vanidad crea el espejismo con la ayuda del silencio cómplice de sus súbditos que llevará al país a un destino con una única certeza pronosticable: el fracaso.
ES POR DEMÁS. Está comprobado hasta el cansancio -me canso ganso- que al sujeto que fue ungido con la investidura presidencial por el pueblo “bueno y sabio” le quedó grande. Aunque la mona se vista de seda… a pesar de que tenga otros datos.
EL “RAYITO” DE ESPERANZA se ha encargado de acotar las expectativas de crecimiento de una nación, merced a su arrogancia, a su decrepitud ideológica, a la sinrazón de la sinrazón. A ratificar que no entiende que no entiende porque como dijo don Teofilito... Obvio resulta decir que lo que natura no da… nos cayó como anillo al dedo.
NO ES LO MISMO hacer campaña para unos cuantos que gobernar para todos. La pérdida de aprobación comprueba que los errores han sido evidentes. Las campañas se ganan con saliva, pero no se puede gobernar con ella. La mal llamada cuarta transformación ni siquiera alcanzó a gestarse, menos a nacer. Su creador se ha encargado de abortarla desde las mismas entrañas del poder por no poder articularla ni con un ápice de congruencia programática y pragmática, y por ende naufragando ideológicamente en su propia demagogia.
EL FALSO TRIUNFALISMO sobrevive para pervertir -una vez más- al ejercicio del poder público. Los dogmas suplen a las propuestas responsables y la manipulación se enseñorea en la agenda pública del gobierno para intentar ocultar la oquedad de sus acciones.
EN LA ANTERIOR ENTREGA de este espacio se consignó con claridad que la calamidad se ha posado en la silla del águila, porque los pretextos y las justificaciones para inculpar a otros por la propia ineptitud se rezagaron ante la verdad de los hechos; se perdieron en el vacío de una gobernabilidad errática y en muchas ocasiones inexistente. Lo que los suficientemente descalificados como conservadores por el tótem del poder no pudieron lograr, son histriónicamente señalados como las causas de la debacle propiciada a fuerza de mantener la cerrazón y el odio, el rencor y la venganza en contra de quienes no comulgan en el mismo altar de la obcecación y la necedad.
LA ÚLTIMA OPORTUNIDAD para rectificar 16 meses de mal gobierno y pésima administración pública fue echada por la borda apenas ayer. Continúa manteniéndose la autocomplacencia de creerse el adalid de la patria, y llegar al grado de compararse con un presidente norteamericano, eso sí, fuera de contexto histórico, ideológico, social, político y económico.
EL DESASTRE está a la puerta porque Andrés Manuel López Obrador no ha sabido y menos ha querido escuchar y ver la realidad que asola al mundo, no solamente a México, en donde debe actuarse con seriedad, responsabilidad y congruencia.
ES IMPOSIBLE conducir los destinos de un país con base a elementos dogmáticos que han probado su ineficacia a través del tiempo.
HABLANDO EN PLATA, los dislates emanados desde Palacio Nacional continuarán en tanto la pasividad siga siendo presa de una sociedad pasmada desde hace casi dos años ante el arribo del populismo trasnochado de izquierda, merced a la creencia de ofrecimientos demagógicos y quimeras políticas.
LOS EMPRESARIOS se han achicado ante los atropellos ejercidos desde el máximo poder. Tal vez traigan una cauda muy larga de irregularidades fiscales que les provoca contenerse para oponerse con firmeza a dichos abusos y evitar que les sean exigidos los pagos fiscales.
LOS SUPUESTOS políticos de oposición han mostrado su empequeñecido carácter al no cuestionar y oponerse realmente ante las medidas arbitrarias que cotidianamente se anuncian desde el púlpito mañanero. Quizá sea por el miedo a perder las pocas canonjías de las que aún pueden gozar o sean llevados a juicio por sus actuaciones públicas no muy diáfanas, que digamos.
LOS DIRIGENTES SOCIALES, como las rémoras, continúan siendo fieles a sus propios intereses soslayando su deber ético por defender las causas e intereses de sus representados. “Nadar de muertito” ha sido una de las cuestiones clave para que esa horda de vividores para evitar de esa manera que sus prebendas les sean canceladas.
ESTE ESCENARIO ha permitido, hasta ahora, que el exceso de confianza se haya apoderado de quien con obcecación, soberbia e ignorancia siga intentado imponer a su arbitrio sus caprichos.
EN LAS REDES sociales se registraron las reacciones que cuestionan severamente un plan de rescate económico que solo existe en el papel.
EN SUS PROPIAS PALABRAS:
Sigue en marcha la construcción del aeropuerto de Santa Lucía; la rehabilitación de las refinerías y la construcción de la planta de Dos Bocas, Paraíso, Tabasco; ahora que se cayó el precio del petróleo, se aumentará la producción de gasolinas en el país; destinaremos a ese propósito 400 mil barriles diarios adicionales para no malbaratar todo el petróleo de exportación y bajar la compra de combustibles en el extranjero. Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
FRASE DEL DÍA:
El egoísta sería capaz de pegar fuego a la casa del vecino para hacer freír un huevo. Sir Francis Bacon (1561-1626) Filósofo y estadista británico.
EL BISTURÍ. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones.
El México “mágico” que pinta en el lienzo nacional el presidente Andrés Manuel López Obrador solamente existe en su imaginación. Hacerlo realidad implica tomar decisiones que incidan de manera favorable en toda la sociedad y no solamente entre la feligresía, que ciega hasta el paroxismo, lo sigue como si fuera el flautista de Hamelin. Por desgracia, cuando el daño esté hecho será demasiado tarde para rectificar. Tal vez entonces sus seguidores podrán reconocer su equivocación. Después de niño ahogado…
COLOFÓN.
No es lo mismo ser borracho que cantinero.