- En su acervo cuenta con más de 250 piezas donadas por su catedrático Ernesto Flores Ancira
- Con esa aportación cultural ya resguarda más de nueve mil piezas históricas en sus anaqueles
Aguascalientes, Ags.- 4 de enero de 2019.- (aguzados.com).- La Bóveda Jesús F. Contreras de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) celebra el incremento que tuvo de sus piezas y colecciones durante el 2018, contándose entre las obras que resguarda más de 250 piezas nuevas que fueron donadas por su catedrático e investigador, Ernesto Flores Ancira.
También es importante recordar que fue Carlos Contreras de Oteyza, otro de los donantes de obras de arte de artistas aguascalentenses, quien al ver que vencía el comodato donde se reguardaba la importante obra de sus antepasados, el escultor Jesús F. Contreras y el escritor José F. Elizondo, decidió contactar a la UAA para donar esta invaluable reserva histórica.
Para Contreras de Oteyza era de gran relevancia acercar las colecciones de Jesús F. Contreras y José F. Elizondo a la ciudad de Aguascalientes, pues ambas son figuras oriundas de la entidad, por lo que se debe mantener el relevante lugar que tienen dentro de la vida cultural del estado.
Dentro del acervo de la bóveda de la Máxima Casa de Estudios, se cuenta también con colecciones pertenecientes a más figuras aguascalentenses como podrían ser Alfonso Esparza Oteo, fundador del Sindicato Mexicano de Autores, Compositores y Editores de Música y autor de temas como “Estrellita Marinera” o “Mi gusto es”, de quien se tiene registro de diferentes documentos, partituras e incluso grabaciones.
Otro de los grandes músicos que cuentan con una colección dentro de la bóveda es el etnomusicólogo y compositor Oscar Malo Flores, quien es autor del Himno de la UAA, partitura que permanece en resguardo de la institución.
Durante el 2018 se recibió una importante donación por parte del catedrático e investigador de esta Casa de Estudios, Ernesto Flores Ancira, quien aportó más de 250 piezas al acervo de la institución, material con el que se logró superar las nueve mil piezas.
Esta nueva colección está formada por objetos antiguos tales como puntas de flechas, vasijas, figuras de ornato, por mencionar algunos, mismas que se mantienen en evaluación por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) a fin de definir concretamente la época de la cual provienen.