Carlos Romo Medina
LO POCO QUE resta de lo que fuera el partidazo, esa maquinaria antes imbatible plagada de irregularidades electorales y abusos de poder en su historia, todavía resulta atractivo para el lucro personal y de grupos. Sigue siendo un jugoso botín, pues.
EL EJEMPLO ACTUAL de ese esquema sigue vigente a pesar de repetidas promesas de refundación, cambio o reestructuración declaradas por los antecesores de Alejandro Moreno Cárdenas, apostado con la bendición de AMLO como presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI). La única congruencia que se asoma históricamente en el tricolor es la consistencia por mentir, engañar, manipular y velar únicamente por los intereses de quienes ostentan el poder momentáneo.
EN PUERTA están la renovación de su dirigencia estatal y las mañas están tan vigentes como antaño. Los procesos “democráticos” internos a modo siguen a la vanguardia. Está por demás comprobado que los dirigentes del priismo nacional no entienden que no entienden los cambios y los nuevos aires que demanda la sociedad en su conjunto. No en vano el descrédito que gozan los partidos ante la opinión pública, en especial el PRI.
AÚN ASÍ, personeros como Pablo Angulo Briceño, a la sazón secretario Técnico del Consejo Político Nacional del PRI, arde en ansias por imponer como dirigente estatal a su compañero en las juventudes priistas, Kendor Macías Martínez, quien a toda costa a buscado “desmarcarse” de su estrecha relación con el exgobernador Carlos Lozano de la Torre. Mentira que no le ha funcionado.
ANGULO BRICEÑO funge como secretario técnico del Consejo Político Nacional del tricolor, bajo la égida de Alejandro Moreno Cárdenas, por lo que desde su posición busca a toda costa allegarle a su jefe elementos incondicionales para que en el 2024 Moreno Cárdenas mantenga el control absoluto de las dirigencias estatales en todo el país.
LO ANTERIOR obedece a una simple situación: el pasado bastante opaco y nebuloso del tal “Alito” le ha pesado tanto, que inclusive ha estado dispuesto a “doblarse”, a plegarse a la voluntad de su “padrino” político que le permitió llegar a la dirigencia nacional del PRI, un sujeto apodado Andrés Manuel López Obrador.
OTRO OSCURO y siniestro personaje en este plan por dotarle de poder absoluto a Moreno Cárdenas es el tío de José Antonio Meade -excandidato presidencial, un híbrido entre priista y panista- cuyas siglas son Jorge Armando Meade Ocaranza, quien llegó a Aguascalientes siendo subsecretario de Organización del Comité Nacional del PRI, para intentar “poner orden” de cara a la renovación de la dirigencia estatal.
SEGÚN EXPRESÓ el delegado del CEN, Humberto Lepe Lepe, dijo que Jorge Meade Ocaranza llegó por instrucciones del líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, para hacer “operación cicatriz” con los priistas del Estado, por lo cual buscará sentarse con los sectores, las organizaciones, los organismos técnicos, jóvenes y mujeres y con el representante del Comité Directivo Estatal.
AUNQUE EL SUJETO citado explicó que “por razones jurídicas” se han venido designando por parte del dirigente nacional algunas dirigencias de carácter provisional en los estados. Expuso que “es el tiempo de Aguascalientes” para que los miembros del partido puedan elegir libremente a un presidente y a un secretario general que habrá de conducir, durante los próximos cuatro años, las actividades del partido.
SEGÚN SUS DICHOS, Meade Ocaranza explicó que para lograrlo se buscará generar acuerdos y consensos que fortalezcan el proceso con base en los estatutos y el método elegido para la designación de la nueva dirigencia, por lo que su trabajo será “vigilar que el partido se apegue estrictamente a la convocatoria y que cuidará la legalidad del proceso”.
COMO TODO ese discurso ha resultado más falso que una moneda de tres centavos, algunos militantes del tricolor como Rogelio Ramírez Soto, David Hernández Vallín, Mónica Santoscoy, Roberto Lamas de Alba (quien por cierto no ve “dados cargados”, o sea que reculó), Hilario Galván Cervantes y Leticia Terrones, han levantado la voz para demandar que ese proceso interno de renovación de la dirigencia estatal se lleve a cabo con piso parejo y sin dados cargados a favor de, adivinaron, Kendor Macías Martínez.
SEGÚN SE PERCIBIÓ en los recovecos priistas, esa situación se complica porque se ha generado en enfrentamiento entre los grupos locales de priistas que comandan por un lado Carlos Lozano de la Torre y por el otro Lorena Martínez Rodríguez, sin soslayar el rechazo de priistas como Otto Granados Roldán y aún el veterano Augusto Gómez Villanueva.
QUIENES CREEN todavía que Moreno Cárdenas va a cumplir su palabra de no servirle de tapete a Morena y a López Obrador, presiento que están equivocados porque si la Reforma Electoral no pasará en los términos que ambiciona el esquizofrénico que habita el Palacio Nacional, no será por sus aptitudes democráticas, sino porque hasta los vividores del Partido Verde (PVEM) y de ese apéndice nefasto llamado Partido del Trabajo (PT), entienden que no les conviene perder sus canonjías.
SIN EMBARGO, es previsible (en mi percepción) que en un futuro no muy lejano Moreno Cárdenas siga alineado con el alienado para evitar la posibilidad de pisar la cárcel por todo el rosario de acusaciones y sospechas que penden sobre su nebulosa actuación cuando fue gobernador de Campeche. Todavía existen mil formas en que el dirigente priista puede brindar sus frescos servicios en favor de quien lo tiene sujetado por el pescuezo.
En sus propias palabras.
Son muy hipócritas. Hablan de que se va a destruir el INE, que va a haber una dictadura, que lo estoy haciendo porque me voy a quedar, que va a haber reelección, pues que no se deje engañar. A la gente que vaya que sepa qué es una marcha, una manifestación en contra de nosotros por la política que estamos llevando a cabo en favor del pueblo. Lo del INE fue una excusa, una bandera, pero en el fondo los que se manifestaron lo hicieron en contra de la transformación que se está llevando (a cabo) en el país, lo hicieron a favor de los privilegios que ellos tenían antes del gobierno que represento. Andrés López, presidente de México.
La frase del día
La sumisión a un hombre débil es disciplina. La sumisión a un hombre fuerte es sólo servilismo. Gilbert Keith Chesterton (1874-1936). Escritor británico.
El Bisturí. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones
Repugnancia tiene la ciudadanía frente a los políticos que mienten, engañan, traicionan, roban y de paso dejan miseria, destrucción y desolación a su paso. De esos, abundan en las filas del PRI, de Morena que es el viejo PRI reciclado, entre los “verdes” y los que se dicen del trabajo que jamás han trabajado y uno que otro despistado entre las filas del panismo y del perredismo, sin soslayar a uno que otro vividor del llamado Movimiento Ciudadano. No en balde el prestigio de los partidos políticos en México está por los suelos y la desconfianza permea entre la población racional, no entre los fanáticos o gregarios admiradores de quienes les entregan prebendas y limosnas.
Colofón
El gatopardismo sigue de fiesta.
