Carlos Romo Medina
VIVIR DE LA MENTIRA. Cultivar el engaño. Acceder al poder con un falso halo sin mácula. Consagrar el vituperio en boca propia. Desdeñar la verdad. Arroparse en la apariencia de honradez. Todo lo que signifique falsear, antes que conducirse con la rectitud de la verdad. La alienación como virtud. La injuria como práctica cotidiana. Y en esencia la oligofrenia como símbolo destacado desde la cúspide del liderazgo.
SI EN CONDICIONES “normales” es inevitable el desgaste que ocasiona el ejercicio del poder porque no se puede quedar bien con tirios y troyanos, evidentemente la situación se agrava en época de crisis cuando se enfrenta a la “nueva normalidad”, pero si a ello se le agregan la indolencia, la ineptitud, el capricho, la necedad, el encono, la mentira, la ceguera y la sordera al gobernar, el escenario se complica exponencialmente y el resultado inexorablemente será al desastre.
EN SU MENSAJE con motivo de su II informe (¿?) de gobierno (¿?), ANDRÉS LÓPEZ condensó en 45 minutos de lectura un catálogo de logros ajenos, como las remesas que envían los connacionales desde Estados Unidos; el aumento en el precio internacional del petróleo (también se adjudicó la baja artificial en el precio de las gasolinas motivado por ese contexto internacional); el desarrollo de la vacuna contra el Covid-19 en el que participan la Universidad de Oxford, los laboratorios Astra-Zeneca y la Fundación de Carlos Slim; citó que muchos empresarios no hayan despedido a sus trabajadores; la negociación del T-MEC que se construyó desde la pasada administración federal.
ANDRÉS LÓPEZ FESTINÓ una baja en el número de diversos delitos, cuando la realidad estadística consignada en las cifras oficiales del INEGI se observa lo contrario. Mintió con descaro cuando mencionó que existe una libertad de expresión, cuando se ha evidenciado la persecución en contra de periodistas y medios de comunicación independientes que han sufrido en carne propia la intolerancia de quienes ejercen el gobierno que él encabeza; los ejemplos se significan en el acoso a la revista Nexos, la diatribas y descalificaciones en contra de los diarios Reforma, El Universal, la revista Proceso. Los ejemplos sobran.
LA INSISTENCIA del inquilino de Palacio Nacional en afirmar que la pandemia ocasionada por el Covid-19 está controlada; que mantiene una buena y respetuosa relación con los empresarios es una quimera más; sus persistentes descalificaciones a los opositores que no coinciden con sus políticas públicas son sistemáticas y recurrentes; trató de ocultar su rechazo a la generación de energía limpia presumiendo falsamente que se está rescatando a Pemex y a la CFE “haciéndolas más eficientes, limpiándolas de corrupción y cumpliendo el compromiso de no aumentar el precio de los combustibles y la electricidad”. Cualquier ciudadano puede constatar que su recibo de pago de energía eléctrica aumenta mensual o bimestralmente, según sea el caso.
RESULTA IRÓNICO que ANDRÉS LÓPEZ afirme que está limpiando de corrupción a la CFE con el director a cargo de esa empresa paraestatal, cuando los antecedentes de MANUEL BARTLETT DÍAZ se significan por sí solos: MANUEL BARTLETT DÍAZ empezó su carrera política como auxiliar del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, hace más de 50 años, en 1962. Fue secretario de la Comisión Federal de Electricidad de 1970 a 1976 con LUIS ECHEVERRÍA como presidente. Con JOSÉ LÓPEZ PORTILLO participó como director para asuntos políticos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de 1976 a 1979. Después, en 1981, BARTLETT se convirtió en secretario general del Revolucionario Institucional. Al año siguiente, cuando el priista MIGUEL DE LA MADRID se hizo presidente, éste lo nombró secretario de Gobernación. MANUEL BARTLETT fue secretario de Educación Pública entre 1988 a 1992, cuando CARLOS SALINAS DE GORTARI era presidente. En 1993 asumió, también por parte del PRI, como gobernador del estado de Puebla, sin embargo, algo pasó con BARTLETT después de 1999, cuando FRANCISCO LABASTIDA le arrebató la candidatura presidencial para las elecciones del 2000. Desde entonces, empezó su proximidad con LÓPEZ OBRADOR. LÓPEZ OBRADOR lo seleccionó para ser director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) al mismo que en 1988 también presidió la Comisión Federal Electoral (CFE) y dijo “se cayó el sistema” (que registraba los votos) en una de las elecciones más cuestionadas de la democracia mexicana.
HABLAR DEL AGRÓNOMO director de Pemex OCTAVIO ROMERO OROPEZA es una pérdida de tiempo, su ineptitud en el área petrolera dice todo lo que se podría decir.
LOS TRES TEMAS principales que están degradando aceleradamente el nivel de vida de TODA la población den México, fueron tratados con la superficialidad conveniente para no meterse en camisa de once varas, además de presentar datos sesgados, falsos, incompletos o “adaptados” a la conveniencia de sus intereses políticos: la debacle económica con sus aristas de cierres de empresas, desempleo, caída dramática del PIB y falta de inversión nacional y extranjera, entre otras cuestiones no menos graves; la ineficiente política en salud pública para atender la pandemia ocasionada por el Covid-19, con un altísimo número de decesos y contagios, falta de equipamiento y de seguridad adecuados al personal médico en los hospitales y clínicas, imparable número de personas contagiadas por el patógeno, desabasto de medicamentos de todo tipo, entre otros; y por último, pero no menos importante, la inseguridad galopante que lejos de disminuir crece en el número de homicidios dolosos, secuestros, extorsiones, robos a casa habitación, asaltos en negocios y vía pública y por supuesto un combate al narcotráfico acotado, limitado, para no molestar a los grandes capos del crimen organizado.
SI LA SEGURIDAD nacional se encuentra de cabeza, no es de extrañarse al estar bajo la responsabilidad de ALFONSO DURAZO MONTAÑO, quien comenzó en el servicio público como subdirector de Difusión en la Secretaría de Programación y Presupuesto, actualmente extinta y que era parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entre 1983 y 1985. Unos años después, Durazo acompañó como su secretario particular a LUIS DONALDO COLOSIO, desde 1989 –cuando éste dirigió al PRI a nivel nacional– hasta la muerte del excandidato a la presidencia, en 1994. Con el presidente panista VICENTE FOX fungió como secretario particular también y ascendió a portavoz presidencial, cargo en el que estuvo hasta 2004. En sus apariciones tenía que arreglar lo que el mandatario hablaba, con la frase “lo que el presidente quiso decir”.
NO ES POR PRESUMIR, pero no hay nada que presumir.
EN SUS PROPIAS PALABRAS
Algunos opositores dijeron que no había nada nuevo en el Informe, que era como una mañanera… a lo mejor tienen razón, porque informamos todos los días. Antes, un presidente no informaba y estaban a la espera de noticias espectaculares, si se daban. ANDRÉS LÓPEZ, presidente de México.
LA FRASE DEL DÍA
Nunca entendemos lo poco que necesitamos de este mundo hasta que nos damos cuenta lo que hemos perdido. J. M. Barrie (1860-1937). Escritor escocés.
EL BISTURÍ. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones.
Los malabares dialécticos siguen marcando la agenda política de la oligofrenia presidencial antes que los resultados concretos a las necesidades reales de la población mexicana. El fiasco se apoderó de las riendas del destino nacional, en tanto se pueda evitar con una oposición seria, responsable y congruente. Después, será demasiado tarde.
COLOFÓN
La vergüenza ha sido desterrada.
