Carlos Romo Medina
CUANDO ALGUIEN TIENE que iniciar una responsabilidad con la carga de dar explicaciones significa que algo no anda bien. Para cualquiera las justificaciones difícilmente podrán llevar al éxito al pretender sustituir los resultados por engaños o cuestiones ocultas. Los esclarecimientos pueden servir para dos cosas: para enseñar algo desconocido o para revelar algo escondido. La verdad es una de las realidades humanas que, irónicamente, le cuesta al hombre mucho trabajo exponer. Nadie nos creemos falibles. Todos sentimos ser invencibles en el ejercicio del engaño y la mentira. Solo la verdad os hará libres, escribió San Juan.
EL PRECANDIDATO del Partido Acción Nacional (PAN) a la presidencia municipal de Aguascalientes, Julio César Medina Delgado, durante algunos años ha buscado con afán enterrar algunos de sus actos cometidos en el pasado cuando fue director local en Aguascalientes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Episodios por los cuales recibió, como mínimo, una amonestación por “negligencia administrativa”, según consta en un documento de la propia Conagua.
A PESAR DE las negativas del precandidato panista Medina Delgado -que por cierto es apadrinado por el gobernador Martín Orozco Sandoval- existe un documento de esa dependencia federal en la que señala con número de expediente PCD-0351/2013 al servidor público Julio César Medina Delgado, con fecha de resolución 2014/03/19 de la instancia del Órgano Interno de Control una sanción impuesta como “inhabilitación” con fechas de inicio 2014/04/02 y término 2024/03/29. La causa: “ABUSO DE AUTORIDAD. Ejercicio indebido de su cargo para (sic) el ofrecimiento de poner en orden títulos, transmisiones de derechos, solventaciones de observaciones, cambio de padrones, contubernio con autoridades locales”.
CONFORME A ESE documento, la inhabilitación impuesta a Julio César Medina por el órgano Interno de Control de la Conagua es por diez años, con una vigencia del 2 de abril del año 2014 y con vencimiento hasta el día 29 del mes de marzo del año 2024. Sin embargo, allegados al precandidato albiceleste entregaron a este columnista una constancia de “No Inhabilitación” expedida y firmada por la directora general Jurídica de la Contraloría del Estado de Aguascalientes, Nelly Carolina Rioja Gómez, en la que señala que “derivado de la búsqueda minuciosa realizada al Registro de Sancionados que obra en poder de este Órgano de Control, donde se lleva el registro actualizado de los servidores públicos que han sido sancionados, tal y como lo señala el artículo 17, Tercer Párrafo de la Ley de Responsabilidades Administrativas del Estado de Aguascalientes; de la consulta digital hecha al Sistema de Registro de Servidores Públicos Sancionados; así como de la búsqueda en el listado de inhabilitados vigente s al día 5 de febrero de 2019, remitido por parte de la Secretaría de la Función Pública, ambos conforme a la cláusula décima quinta del Acuerdo denominado ‘Fortalecimiento del Sistema Estatal de Control y Evaluación de la Gestión Pública, y Colaboración en Materia de Transparencia y Combate a la Corrupción’ celebrado entre el Poder Ejecutivo Federal y el Ejecutivo del Estado de Aguascalientes, publicado en fecha diecinueve de marzo del año dos mil doce en el Periódico Oficial del Estado, se desprende que: NO EXISTE INHABILITACIÓN A NOMBRE DE C. JULIO CESAR MEDINA DELGADO”.
ANTE LA EXISTENCIA de dos documentos que expresan versiones totalmente opuestas vale la pena preguntarse cuál es el que tiene validez legal. ¿Quién miente? ¿El Órgano de Control Interno de la Conagua? ¿La Dirección Jurídica de la Contraloría General del Estado de Aguascalientes? ¿Por qué Julio César Medina Delgado, ante la gravedad de los señalamientos referidos no ha solicitado directamente al Órgano de Control Interno de la Conagua el documento que lo exonere de lo señalado en el expediente PCD-0351/2013? Todavía persiste la duda por saber la verdad, por lo tanto, mientras el aspirante panista no aclare con documentos válidos en mano la realidad de su situación, las dudas sobre su desempeño pulcro y honesto en actos futuros también podrán estar en duda. ¿Bajo esa nube de dudas cree que el electorado podrá creerle? Lo que no ha sido refutada es la amonestación por “negligencia administrativa” y aun así ¿todavía quiere “administrar” los bienes del municipio capitalino? Como siempre, el electorado tendrá la última palabra.
POR CIERTO, en el mismo documento de la Conagua en el que se señala a Medina Delgado en calidad de “amonestado”, figuran otro personaje también sancionado y que está muy cerca del gobernador Martín Orozco Sandoval. Se trata del secretario general de Gobierno, Ricardo Enrique Morán Faz, quien cuenta en su hoja de vida profesional con los siguientes atributos: “es licenciado en Relaciones Industriales por el Instituto Tecnológico de San Luis Potosí. Experiencia de más de 5 años en la iniciativa privada a nivel gerencial y de 25 años en la administración pública, tanto a nivel municipal como estatal y federal, con un enfoque en mejora de procesos, combate a corrupción y negociación de resultados tangibles. Con experiencia también en manejo administrativo y operativo de los programas federales de inversión. Fue 2 veces Subsecretario de Gobierno, y hoy es Secretario General de Gobierno”.
MORÁN FAZ fue inhabilitado por ese mismo Órgano Interno de Control de la Conagua con fecha 01 de diciembre del 2015 después de haber fungido como director local del Zacatecas de ese organismo público. Tal vez podríamos ver otra constancia de no inhabilitación similar a la expedida por la directora jurídica de la Contraloría del Estado de Aguascalientes, Nelly Carolina Rioja Gómez, pero esta vez, ¡claro!, con un destinatario diferente.
EN LUGAR de dar risa, da pena. El vástago político del exgobernador Carlos Lozano de la Torre y aspirante a obtener la candidatura de Morena a la alcaldía capitalina, Arturo Ávila, tiene una imaginación harto limitada, pues seguramente a base de billetazos logró “juntar” a un grupo de señoras de las colonias del oriente de la ciudad para que fueran a “apoyarlo” durante su registro como precandidato a ese cargo de eleción popular.
SI ESTÁ muy claro que la forma de hacer proselitismo de los “nuevos” miembros que se quieren colgar de la cuarta deformación, perdón, transformación, no ha cambiado en nada para imitar los viejos recursos priistas de acarrear “simpatizantes” para demostrar que se tiene un múúúsculo político enooorme y un “arrastre” con las masas de esos de “rockstar”. Si Arturo Ávila cree que con billetes se va a ganar la simpatía y el apoyo de la gente, es porque ha de creer que todavía las personas usan taparrabos y se deslumbran con espejitos. Nadie gasta grandes cantidades de dinero a cambio de nada.
EN SUS PROPIAS PALABRAS:
Eso es muy ficticio, es como para decirles: ternuritas. Es evidente que no les gusta lo que está sucediendo en el país, no nos ven con buenos ojos, están en contra, pero todo eso es permitido, es la democracia, es el derecho a disentir, nada más que no hagan el ridículo, que hagan bien las cosas. Es legítimo, nosotros garantizamos el derecho a disentir, entiendo que están desesperados porque no se repone el conservadurismo, sólo que no están haciendo bien las cosas. Les voy a dar un consejo respetuoso, un buen consejo no se le niega a nadie. Ese es el problema que tienen, ausencia de cuadros políticos. Se desesperan y reúnen a gentes afines, los meten en un grupo y hasta ellos mismos dicen: yo no fui consultado, no soy parte de ese grupo. Pero es la desesperación. Veo bien que se reagrupen, están atravesando una crisis y se están precipitando, pensando que de la noche a la mañana pueden formar un grupo… no. No de la noche a la mañana van a formar cuadros, no sacar la nota de: ya se reunieron tantos. Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, palabras dirigidas al grupo de políticos y empresarios que buscaría hacer contrapeso a su gobierno.
FRASE DEL DÍA:
No que me hayas mentido, que ya no pueda creerte, eso me aterra. Friedrich Nietzsche (1844-1900). Filósofo alemán.
EL BISTURÍ. El ajuste de cuentas entre los sucesos y las declaraciones.
Lavar los pecados del pasado nunca ha sido fácil y menos enterrarlos en el olvido. La sombra de dudas que se ciernen cada vez con mayor frecuencia sobre quienes afirman servir a la sociedad y quienes pretenden hacerlo desde posiciones públicas más altas, están dejando a la ciudadanía con menos opciones para decidir a quién elegir para regir los destinos de la comunidad. Pareciera una insistencia procaz en decirlo, pero la gran mayoría de los miembros de la mal llamada clase política, siguen acrecentando la brecha de la credibilidad y la confianza entre ellos y el resto de los mortales de a pie. ¡Qué pena!
COLOFÓN.
El espejo está roto.