Alfonso Morales Castorena
Aguascalientes, Ags., 14 de agosto de 2014. (aguzados.com).- En esta ocasión ofrecemos a nuestros lectores segunda y última parte de Un Recorrido de Fe, que aborda el tema de la LIX Romería de la Asunción y que versa sobre la misión que la iglesia está llamada a realizar para comunicar el gozo del Evangelio de Jesucristo a todos los pueblos y María Misionera nos lleva a los Hermanos, respectivamente, conocido ya el segmento que iniciará el peregrinar y que hará referencia a los ocho puntos temáticos del Tercer Sínodo Diocesano celebrado en nuestra ciudad, como lo citamos en nuestra primera entrega.
Esta segunda parte denominado "Año de la Misión" estará integrada por seis carros alegóricos que como de costumbre serán acompañados por bandas de guerra, danzantes, comparsas, grupos musicales diversos y centenares de romeros, entre los que se contarán religiosas, sacerdotes, laicos y una gran parte de la sociedad aguascalentense y de los municipios de la capital y de otras entidades federativas.
Año de la Misión
El primero de los vehículos de esta segunda caravana llevará como lema "La Misión Permanente de la Iglesia es Evangelizar", que refiere que Dios quiere que todos los hombres se salven y necesariamente pensó en una misión permanente, en una misión histórica, en una misión evangelizadora que hablara de la Buena Noticia siempre, en todo lugar, en cada rincón del mundo a cada segundo.
La iglesia, por ende, está en el designio salvador de Dios desde la eternidad, pensada para anunciar, para perpetuar y para una misión permanente, como oraba el Maestro a su Padre "vayan pues y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos (Mt. 28.19A), la misión de Jesús es la misión de la iglesia, "así como Tú me has enviado al mundo, así Yo también los envío al mundo" (Jn.17.18).
La identificación con Cristo es la configuración con su ser y con su actuar, es ser adoptados en la filiación divina y compartir una misma buena noticia y la iglesia prolonga la misión de Jesucristo, la hace extensiva en el mundo y la anuncia a todos los hombres a los que Él no pudo anunciar físicamente.
En la iglesia se perpetúa el envío que surgió en el seno de la Santísima Trinidad, cuando el Padre envió a su Hijo que se encarnó por obra y gracia del Espíritu Santo, refiere el lema de ese vehículo.
El siguiente lucirá la leyenda "La Alegría de ser Discípulos y Misioneros de Cristo" en la que se implora el auxilio de la Virgen para que nos ayude a ser buenos obreros del Evangelio como su Hijo lo demanda "no se alegren porque los espíritus se les sometan, alégrense de que sus nombres estén escritos en los cielos".
No debemos vanagloriarnos como si fuéramos nosotros los protagonistas, protagonista solo hay uno, el Señor, Él es el único protagonista y nuestra alegría es solo ésta, ser sus discípulos, ser sus amigos, como dice el Evangelio "setenta y dos volvieron de su misión llenos de alegría, porque habían experimentado el poder del Nombre de Cristo contra el mal"
Ya el Papa Francisco I había exhortados a los fieles a que no tengan miedo de ser alegres, esa alegría que nos da el Señor dejándolo entrar en nuestra vida, nos invita a salir fuera de nosotros, a las periferias a anunciar el Evangelio, no tengan miedo, ¡Alegría y Coraje! (Angelus Vaticano, 07 Julio 13).
En el tercero de los vehículos se leerá el lema "Enviados a Anunciar el Evangelio del Reino de la Vida" que refiere que los apóstoles, discípulos y misioneros, somos todos los miembros de la iglesia, obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos, aunque lo hagamos en distintos frentes y de diferentes maneras, todos estamos encargados por Jesús a proclamar su reino.
El cuarto carro alegórica tendrá como lema "El Discípulo Misionero en la Pastoral de la Iglesia" que recomienda la necesidad que tiene la parroquia de reforzar su opción de hacerse misionera para ser cristiana, así realizará fielmente su misión evangelizadora hacia toda la gente, por ello el misionero universal ha de reflejarse en todos sus miembros, en las estructuras parroquiales y en sus diversas acciones pastorales.
El penúltimo automotor de esta caravana versará su lema en "La Visita Ad Limina, los Obispos en comunión y misión de la iglesia", que tiene la finalidad de honrar los sepulcros de los apóstoles Pedro y Pablo y de encontrarse personalmente con el Papa, Obispo de Roma y sucesor de Pedro, para manifestar la comunión con Él.
Como se recordará el obispo de la Diócesis, José María de la Torre Martín, hizo puntual ese lema en la visita que realizara hace dos meses al Santo Padre, cuyo encuentro personal expresó la responsabilidad de cada obispo como sucesor de los apóstoles y fortaleció los vínculos de comunión de la Diócesis con la iglesia universal en la Fe, en los sacramentos, en la disciplina común y en la caridad de todos los miembros del pueblo de Dios.
Por último el vehículo que cerrará esta segunda sección de la LIX Romería de la Asunción, lucirá el emblema "150 Años de la Provincia Eclesiástica de Guadalajara" que cita que fue el Papa Pío IX quien elevara la sede episcopal tapatía al rango de metropolitana con la Bula "Romana Ecclesia" el 26 de enero de 1863.
La historia eclesiástica nos dice que fue el obispo Don Pedro Espinoza y Dávalos quien acompañado del también obispo Don Ignacio Mateo Guerra y Alva, quien ejecutara la Bula citada en la ciudad de Lagos de Moreno, Jalisco, el 17 de marzo de 1864, ya que fue el primer lugar de su diócesis a la que arribó a su regreso de Guadalajara.
Esa misma historia refiere que una provincia eclesiástica la forman varias diócesis que se agrupan con la finalidad de promover una acción pastoral común, según las circunstancias de los lugares y de las personas, además de fomentar de manera adecuada las recíprocas relaciones entre los obispos diocesanos. (cfr.cic.c431).
María Misionera nos lleva a los Hermanos
La tercera y última parte de la romería la integrarán cuatro carros alegóricos, que presidirán el arribo a la Catedral del llamado "carro triunfal" con el que culminarán los festejos anuales a la Virgen de la Asunción de las Aguas Calientes, como en antaño se conocía.
El primero de esos cuatro carros llevará como lema "María, Modelo del Misionero" que como lo indica, "María es la gran misionera, continuadora de la misión de su Hijo y formadora de misioneros, María es Santa, es Bendita y Misionera, porque lleva en su vientre al Santo, bendito y misionero, el que está lleno del Espíritu Santo, Ella así como dio a luz al Salvador del mundo, trajo el Evangelio a nuestra América".
Enseguida irá el vehículo con el lema "María, fundamenta su labor misionera en la roca del Evangelio", que nos dice que ella es la misionera que nos acerca a nosotros para acompañarnos por vida, abriendo los corazones a la fe con su cariño materno.
Como una verdadera madre, Ella camina, lucha con nosotros y derrama incesantemente la cercanía del amor de Dios a través de las distintas advocaciones marianas, ligadas generalmente a los santuarios, comparte las historias de cada pueblo que ha recibido el Evangelio y entra a formar parte de su identidad histórica. (EG 286).
En el preámbulo del cierre peregrino, rodará el carro alegórico luciendo el lema "La Diócesis de Aguascalientes sigue los pasos de María Misionera" en alusión a que nuestra diócesis camina bajo el amparo de María, ella está con nosotros durante todo el día, con ella nos sentimos tranquilos, como un niño que descansa en los brazos de su madre.
Cuando estamos con pena y dolor, igual como ella cuando estuvo frente a la cruz, nos sentimos consolados, porque Jesús nos la dejó como nuestra madre y en efecto, seguir los pasos de María, es llegar a Jesucristo y a través de Él, al Padre Celestial.
Por último el vehículo llamado "carro triunfal" tendrá el lema "María Asunta nos enseña el camino para llegar a Dios" y refiere que la Asunción es un signo que refleja el destino de la iglesia y muestra la realización de las promesas de Dios.
Es la imagen culminante de la iglesia, una representación de lo que será el paraíso, la plena comunión con Dios, la posesión total del ser humano de parte de Él.
Y al tiempo que las campanas repiquen en todo lo alto, los feligreses elevarán la oración final que cerrará con broche de oro la tradicional Romería de la Asunción:
¡Oh Madre! que se acerque para todos el tiempo de la paz y de la libertad, el tiempo de la verdad, de la justicia y de la esperanza.
Santa María, ora por el pueblo de Aguascalientes, conduciéndolo hacia tu Hijo que vive y reina por los siglos de los siglos, Amén.
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