- Un encuentro con Rocko, quien habla de la intimidad de su vida artística, sus sueños, sus metas
- Te marca ver tu primer trabajo publicado, pues dijo Picasso, “cualquier pendejo pinta, pero artista es el que vende”
- Falta implementar una política pública en materia cultural y una legislación que promueva la creación artística
Carlos Romo Medina
Aguascalientes, Ags, 4 de agosto 2014. (aguzados.com).- Si alguien pregunta por Cristian Garduño Ortiz, nacido en el Distrito Federal, pocos sabrán de quién se trata. Cuando se menciona el nombre de Rocko, la cosa cambia y de inmediato lo ligan con magistrales caricaturas que se han publicado en revistas internacionales como “Rolling Stone” y “Playboy”.
AGuzadoS.com tuvo un encuentro con este joven artista amante de su trabajo y apasionado por la vida. Conozcamos más acerca de la vida de este talentoso artista mexicano.
Siempre tuvo la inquietud de dibujar, era algo que le gustaba y confiesa no haber tenido nunca un referente y ese fue el principal problema con el que se encontró porque no veía a alguna persona que se dedicara al dibujo o a alguien que observara que se puede vivir de su arte, eso solamente se veía en televisión o en periódicos y fuera de México, gente que vive de su arte.
"Cuando uno comienza, por lo regular los comentarios en este país es que no se puede vivir de crear arte, si te vas a otros país, a Alemania, a Francia, allá si te pagan pero aquí no", lamenta.
Sabía que tenía la facilidad de dibujar, y cuando se dio cuenta que empezó a ganar concursos decidió dedicarse a hacerlo profesionalmente pero sin ninguna idea de conseguirlo. Tuvo que ver qué opciones tenía y de lo primero que echó mano fue tocar puertas en los periódicos para elaborar lo que se denomina cartón editorial. Que por cierto no era muy de su agrado en ese entonces, según confiesa.
Tocó las puertas del periódico “Excélsior”, pero le dijeron que en ese sitio no se podía porque tenía que ser familiar de algún trabajador para poder ingresar, pues eran los tiempos en que ese diario se manejaba como cooperativa.
Cuenta una anécdota. Cuando decidió ir al cine a ver una película, era el Cine Teatro “El Palacio Chino” y se fijó que en la acera de enfrente había un letrero que decía “EL Valle de México”, un diario no muy conocido entonces, y narra que se le ocurrió entrar para preguntar si había oportunidad de trabajar y le dijeron que sí, que preparara un dibujo sobre un tema determinado para el día siguiente y le comentaron que se lo publicarían.
-Dicho y hecho, fue mi primer dibujo, explica.
Y nos comenta sonriente evocando aquellos momentos y recreándolos en su memoria.
Se le inquiere si aún lo conserva y afirma positivamente, aunque comenta que es “muy burdo el trazo, no hay mucho sentido, eso sí, es una crítica, pero sí faltaba mucha práctica y eso lo entendí y lo aprendí”.
-¿Cómo te marcó y cuál fue el contexto en el que desarrollaste tu primer trabajo? S le inquiere y responde con una expresión de hurgar en su pasado.
-Para empezar sí te marca por el simple hecho de ver tu trabajo publicado. Ya pasas a otro nivel pues es un orgullo verlo, te emociona, es una forma de sudar adrenalina el verlo. El tema sobre la obesidad de los elementos de seguridad, de los policías, que no utilizaban el chaleco antibalas porque ya no les quedaban.
Hace una pausa para sonreír y con una mirada pícara continúa narrando.
-Era una caricatura que describe a unos policías obesos que dicen: “elementos a dieta o chalecos nuevos. Qué será más práctico”. Un rollo así. Fue mi primera caricatura y el editor me dijo que me iba a dar una oportunidad de publicar mis trabajos. Y yo agradecidísimo.
Tiempo después, explica Rocko, tuve conocimiento de la existencia del Club de Caricaturistas, por lo que motivado por esa caricatura decidí ir a dicha sociedad y varias veces fui pero estaban cerradas las puertas del dichoso Museo de la Caricatura.
-¿Cómo nace Rocko y por qué ese nombre?, se le pregunta.
-Cuando llego a la Sociedad de Caricaturistas veo que hay mucha competencia. Cuando llegué vi que había otros trece caricaturistas que estaban igual que yo, sedientos de buscar un espacio. Y había gente que ya estaba muy posicionada en el medio, ya estaba Boligan en El Universal, ya estaban Flores, Carreño, Helguera, todos ellos ya estaban bien colocados pues eran caricaturistas de años en el medio y con mucha trayectoria.
Entonces, explica, me di cuenta que tenía que hacer algo diferente, tenía que generar un producto y saberlo vender. Por eso cambié el nombre porque todo el mundo se quedó con el nombre de Cristian, pero no se acordaban del nombre. Era el niño que hace monitos, el muchacho que hace dibujos. Entonces decidí cambiarlo por una palabra un poco más comercial, decidió meterme a lo de la mercadotecnia, decidí utilizar la palabra del rock que para muchos es muy fácil de recordar. A veces recuerdan el nombre, pero no lo que hago.
Cuando llegué al Museo de la Caricatura me di cuenta que me gustaba hacer lo que hago, me gusta el cine, la literatura, el rock, los temas de violencia y poco a poco fue entendiendo más de política, y me di cuenta que podía hacer todo eso. Podía hacer personajes, podía hacer caricatura, me gusta pintar y descubrí que podía mezclar pintura y decidí desarrollar y generar mi concepto que está basado en pintura, caricatura e ilustración. Por lo menos ofrecer algo diferente de la caricatura tradicional.
Al abordar el tema de la literatura se le preguntó sobre el género y obras favoritas, y sin dudar Rocko expone que es muy fan de Cheb Lukovsky, "para mí son los mejores poemas que he leído".
En el terreno de la pintura Rocko se declara fanático de Dalí, de Picasso, “me gusta mucho el neo realismo”. Y confiesa que de los caricaturistas a nivel mundial para él, el mejor es Sebastián Krüger. Sin embargo, insistió en su enorme gusto por la obra de Salvador Dalí puesto que incursionó en diferentes expresiones, fotografía, cubismo, impresionismo, en todo. Hizo todo lo que quiso. Además el trazo que tiene es espléndido, es un master.
-¿Cómo es que Rocko empieza a crecer profesionalmente después de su primera experiencia en El Valle de México y haberse acercado al Club de Caricaturistas?
Rocko responde con la vitalidad que le es característica, pone a trabajar su memoria y expresa efusivo.
-Empezaron a invitarme a exposiciones, seguí tocando puertas para publicar en periódicos, y entonces comenzaron a publicar mis trabajos en la revista “Lapiztola”. Continué buscando espacios y parece que nada tiene que ver, pero como soy fanático de las luchas colecciono máscaras de los luchadores y suelo coleccionar lo que me gusta. La primera revista en la que comencé a publicar con regularidad fue “Box y Lucha” y cuando llegó, mi sorpresa es mayúscula pues el director era el doctor Alfonso Morales. “El que yo veía en la tele y fue impactante y gratificante conocer a gente que admiras”. Aun así toqué puertas sin poseer un estilo definido en mis obras, seguía experimentando. Me encerraba meses, meses completos a pintar, a pintar, a pintar. ¿Por qué?, porque sabía que tenía que mejorar. Hay mucha competencia y finalmente el trabajo es el que habla y hay que mejorarlo por si quieres estar al menos a un buen nivel para competir con todos estos monstruos de la caricatura que ya publican en diferentes medios.
Cuando llegué a la revista “Rolling Stone”, una de las revistas más famosas y prestigiadas en donde me comenzaron a dar páginas completas para desarrollar mis obras, eso para mí ya era un sueño. Y después de “Rolling Stone” comienzan a llamarme de “Play Boy”. El cambio vino después de que me dan la oportunidad en “Rolling Stone”, pues antes de eso estuve tocando puertas, y de repente empiezan a llamarme de la revista “Switch”, de la revista “H” Hombre. Así sucedió después de publicar en “Rolling Stone”.
-¿En quién se inspiró Rocko para definir su estilo?
-He tratado de desarrollar mi estilo propio, sin embargo cuando vi el trabajo de Sebastián Krüger me impactaron demasiado las expresiones de sus trazos. Igualmente cuando veo las pinturas de Dalí me impactan mucho.
Rocko ejemplifica con una analogía muy simple. Es como cuando vas a cine a ver una película de Karate Kid y ves a los niños que salen del cine lanzando patadas al aire. Lo mismo me pasa, por eso cuando veo películas como “El Padrino”, me dan ganas de dibujar a Marlon Brando. Cuando leí por segunda vez “El Quijote”, terminé por hacer una caricatura de él. Cuando veo algo que me gusta me motiva y después salgo dando patadas como los niños después de ver una película.
-¿Cuál es tu mayor sueño dentro del arte? ¿Cuál es tu meta?
-¡Oh! Mira, para mí siempre fue un sueño el publicar y poder vivir de lo que a uno le gusta hacer. Ahora estoy en otra etapa que tal vez no tenga nada que ver con lo que estoy haciendo, producción de televisión. Gracias a los amigos y al camino que he recorrido en estos años en lo que aprendí mucho y conoces a gente muy talentosa. Por ejemplo en el periódico deportico “Esto” conocí a fotógrafos muy buenos, algunos de ellos son Premio Nacional de Periodismo, unos verdaderos profesionales del periodismo gráfico y siguiéndolos, platicando con ellos, preguntando como amigos aprendí de ellos muchísimo. Creo que estoy en la etapa de experimentar cosas nuevas. Como artista plástico, no tanto como caricaturista, me interesa crecer. Como caricaturista he recibido diversos reconocimientos pero no pienso dejar la caricatura ni mi estilo ni dejar de hacer lo que me gusta. Como dijo Pablo Picasso “cualquier pendejo pinta, pero artista es el que vende”. Y Rocko dice: “no es lo mismo pintar lo que vendes, que vender lo que pintas”.
Afirma Rocko que ha experimentado todas las técnicas de pintura, desde los tatuajes, murales, en grabado todavía no, debo seguir experimentando técnicas, estilos, siempre hay algo que mejorar en expresión, en concepto, en todo se puede mejorar.
Admira en pintura a Dalí, en grabado no hay vuelta de hoja a José Guadalupe Posada, en muralismo no hay más que los tres mejores mexicanos, Orozco, Rivera y Siqueiros. De Posada hay mucha obra que no se conoce y que son grabados buenísimos, que son retratos y el arte sacro. El grabado de Posada tiene una calidad que no es comparable.
Facilidades y obstáculos de las autoridades para que se desarrolle el arte en el país.
-El primer obstáculo en cuanto a instituciones es la falta de capacidad de los directivos. El poner gente que no comprenda las necesidades del artista. Un artista no puede ser director de un instituto cultural. ¿Por qué?, porque un artista no es burócrata. Debe estar una persona que comprenda las necesidades del artista, no se puede poner a cualquier persona. Ése es el principal problema, que no se nombran a las personas indicadas. No saben de las necesidades del artista, lo que requiere un pintor, no es lo mismo que necesita un músico o un artista escénico, son muy diferentes las necesidades. La persona que se encargue de dirigir una institución de cultura debe cubrir cierto perfil. No es sólo hacer un poco de ruido, sino hay que generar espacios. Aquí no se preocupan por hacer un bazar cultural, no hay un censo de cuántos artistas aguascalentenses existen, cuántos espacios culturales realmente existen ni cuántos están abiertos a todos. Cuántos recursos se generan y que en verdad se destinen para fomentar lo que es arte y cultura. ¿Por qué no se implementa en el sistema educativo? Son muchas cosas las que se pueden hacer. Y ¿por qué falta eso?, porque en ocasiones las autoridades se conforman con salir en el periódico o que ya hicieron un evento. Debiera haber un programa de gobierno, una política pública en materia cultural para desarrollar más espacios de esa naturaleza. Por desgracia hay muchos espacios deshabilitados aquí en Aguascalientes. Las instituciones tienen que trabajar para levantar esa área pero no lo hacen y so espacios desperdiciados.
A veces es miedo pero en otras ocasiones es un tanto de ignorancia de las autoridades para permitir el desarrollo de los artes críticos. Llegan al lugar en donde están sin tener un amplio panorama de lo que están agarrando. En la legislación se pueden hacer muchas cosas en beneficio del artista. Se puede inmiscuir la iniciativa privada para generar espacios públicos en donde el arte sea gratuito para el público pero que el artista no regale su trabajo y que sea la iniciativa privada quien esté pagando al artista en espacios que sean del gobierno. Hay muchas cosas que se pueden legislar, lo que ha faltado es creatividad de parte de los políticos, falta de interés.
¿A dónde va Rocko en su vida?
-Ahorita disfruto el día, por eso es un poco difícil contestar esa pregunta. Hace unos años estuve en terapia intensiva, me dijeron que ya no la contaba. Tuve parálisis, estuve mal, mal, mal. Me dijeron que ya no me pondría en pie y aquí estoy gracias a Dios como si nada. Aprendí que disfruto lo que tengo en el momento, vivo en el momento. Disfruto de lo que hago y hago lo que me gusta. Lo que quiero hacer es crecer como artista plástico aunque ahora no estoy publicando en medios, me he metido más a la producción de televisión, pero por lo mismo no me gusta hacer tanto trabajo a destajo, es mejor disfrutar el trabajo que uno está haciendo, darle la mayor calidad y mejorar como se debe de hacer. Crecer en todos los aspectos, en técnica, en estilo, en contactos, crecer en todo aspecto. En lo personal crecer con mi familia. Seguir experimentando y mezclarlo todo con lo que me gusta.
¿Artistas favoritos en el rock?
-Como pueden ver, soy muy clásico. Para mí la mejor banda de rock es “Led Zeppelin”. Me gustan las cosas que están bien hechas, por algo soy muy clásico. Ahora escuchamos bandas de rock que son refrito del refrito del refrito. Me gusta el rock con “The Doors”, “Blacksabath”, “Led Zeppelin”, “Rolling Stones”, “The Beatles”. Bob Dylan, pues sin él no habría Beatles, o por menos no como los conocemos.
El éxito de una película es tener una buena historia para ser contada. ¿Qué historia nos puede contar la vida de Rocko?
-Mi vida ha sido una montaña rusa y me he divertido como no tienes idea. Agradezco todo lo bueno y lo malo porque me hacer ser lo que soy hoy. Hasta los momentos más dramáticos han sido divertidos. Todo se disfruta. Hasta el momento más dramático tiene su lado chusco En síntesis, una comedia.
Premios: Premio Nacional de Periodismo “José Pagés Llergo”. 5° Lugar en China, lo que le ha valido ser considerado dentro de los 10 mejores caricaturistas en ese país. Premio a la Excelencia en 20 países diferentes.
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