- En México el cáncer de mama es la enfermedad que causa mayor número de muertes en mujeres
- Las mujeres de 40 a 50 años deben realizarse la mastografía por lo menos una vez cada dos años
- Mientras que las mujeres de 50 años en adelante deberán hacerlo una vez al año
Aguascalientes, Ags.- 18 de octubre de 2020.- (aguzados.com).- La Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) dedica importantes esfuerzos para desarrollar acciones enfocadas al cuidado de la salud y el bienestar de las personas; para complementar lo anterior, la institución también se suma a las iniciativas que se impulsan desde entes y organismos, tanto de carácter nacional como internacional.
La Organización Mundial de la Salud (WHO, por sus siglas en inglés) promueve durante octubre la sensibilización sobre el cáncer de mama, de ahí los diversos programas y campañas que hace llegar a las personas, con la intención de crear conciencia e incentivar acciones para prevenir y detectar a tiempo esta enfermedad.
En nuestro país, de acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), este tipo de cáncer es el que causa el mayor número de muertes en mujeres, pues provoca aproximadamente un deceso cada dos horas.
De hecho, los datos levantados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) muestran que Aguascalientes ocupa el tercer lugar de las entidades con mayor incidencia de nuevos casos de este padecimiento, al registrar 66.64 nuevos casos por cada 100 mil mujeres de 20 años o más; en el primer lugar, se ubica Morelos (151.94), seguido de Colima (139.62).
Al respecto, la profesora numeraria y especialista en ginecología del Centro de Ciencias de la Salud (CCS) de la UAA, Georgina Torres Cabral, señaló que es vital la atención, asesoría y seguimiento de médicos ginecólogos desde que la mujer tiene su primer periodo.
De esta manera, los especialistas estarían en mejores condiciones de brindarle información oportuna y necesaria de acuerdo con la etapa física y fisiológica que esté viviendo; además, en virtud de que conocerían el historial clínico de la paciente, también contarían con más elementos para detectar factores de riesgo que pudieran conducir al surgimiento de esta enfermedad, algunos de los que se enlistan a continuación: tener antecedentes de familiares que hayan padecido cáncer de mama, alimentación inadecuada, fumar, consumir bebidas alcohólicas de manera frecuente, tener hijos después de los 30 años, haber recibido tratamiento hormonal para la menopausia, vida sedentaria, entre otros.
Torres Cabral precisó que si bien es necesario que las mujeres practiquen la autoexploración de manera habitual, en tanto que favorece el conocimiento y reconocimiento de su cuerpo y con ello, detectar cambios en él, lo cierto es que las mastografías son los estudios más adecuados para identificar anormalidades que no se llegan a percibir mediante la palpación de mamas.
De igual manera compartió dos recomendaciones importantes: las mujeres de 40 a 50 años de edad que no presenten factores de riesgo, deben realizarse este estudio por lo menos una vez cada dos años; mientras que las mujeres de 50 años de vida en adelante, deberán hacerlo una vez al año.
La mastografía consiste en la toma de dos radiografías de cada mama y el procedimiento demora alrededor de 15 minutos; el IMSS solicita que las mujeres se apeguen a las siguientes directrices cuando acudan a realizarse este estudio: vestir prendas que sean de dos piezas; asistir recién bañadas y evitar el uso de desodorante o talco, ya que son productos con minerales que podrían afectar los resultados de los rayos X.
Por otro lado, Torres Cabral puntualizó que los tratamientos hormonales para combatir los síntomas de la menopausia deben suministrarse bajo el estricto control de un especialista, quien se encargará de estipular las dosis y los periodos en que se suministrarán.
Dijo que estos tratamientos no deben superar los cinco años, debido a que el cáncer de mama se caracteriza por ser un padecimiento que se encuentra estrechamente vinculado a los estrógenos (es decir, es estrógenodependiente); por lo tanto un tratamiento hormonal prolongado, provocaría que la enfermedad apareciera con mayor facilidad.
Finalmente, hizo una invitación a que las mujeres acudan con un médico ginecólogo, para que conozcan, de acuerdo con la etapa de vida en la que se encuentren, las afecciones a las que serán propensas; las alteraciones menstruales que podrían padecer una vez que comience su periodo menstrual; información relacionada con la planificación familiar; detección del virus de papiloma humano, cuya incidencia ocurre principalmente entre los 20 y 30 años, así como el cáncer de mama y cáncer de ovarios, padecimientos recurrentes en mujeres de 40 años en adelante.