- Isidoro Armendáriz García
- Todo indica el probable triunfo de la fórmula Alito-Carolina para dirigir al Revolucionario Institucional
Aguascalientes, Ags.- 4 de agosto de 2019.- (aguzados.com).- Las matemáticas, las alianzas, las propuestas y la intensidad de la campaña delatan, por anticipado, el muy probable triunfo de la fórmula Alito-Carolina para la dirigencia nacional del PRI.
La contienda interna no debe verse como dos alineamientos de fuerzas antagónicas irreconciliables, por el contrario debe tomarse como un agradable ejercicio democrático para la relegitimacion ideológica, social y política del PRI.
Esta elección interna significa, tal vez, la última llamada; es decir, la prueba de fuego para vivir o morir. De ahí qué los priístas debemos aprender las lecciones de la historia y mantenernos unidos y de pie en la crisis y no vencidos por la adversidad.
Este 11 de agosto los priístas tenemos una cita en la mesa receptora de votos que nos toque. De este proceso democrático saldrá el nuevo liderazgo del PRI nacional. Un liderazgo de compromiso, entrega y acción sin límites para liberar al PRI de la situación penosa por la que transita.
Qué duda cabe, Alejandro Moreno (Alito) y Carolina Viggano serán presidente y secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. Hay que destacar que no obstante esta decisión de las bases militantes, los priístas en competencia partidarios de sendas fórmulas deberán unir fuerzas, hacer frente común y conciliar intereses para enfrentar a las oposiciones.
Entender, pues, que en la acción participativa de la democracia se gana o se pierde en la lógica de la alternancia intrapartido o en la competencia externa.